Shadow of Rome se ubica en la Roma republicana, en los años finales del dictador César. Julio César, después de vencer en la guerra civil a Pompeyo, es confirmado como dictador perpetuo, siendo de facto (aunque no de titulatura) el primer emperador romano. Pero el alma republicana representada por el senado bajo la dirección de Cicerón conspira para acabar con él. Así, poco después, el divino Julio cae muerto al lado de la estatua de Pompeyo.
¿Quién ha sido el asesino?
Cicerón acusa explícitamente a Uesnio, padre de un victorioso militar que está en el limes germano. La condena es vista por Octaviano, sobrino de César que no cree lo dicho por el famoso orador, y se propone descubrir la verdad. A la muerte de César, Marco Antonio es nombrado Cónsul y, con ello, comienza el juego en sí.
La muerte de César es uno de los grandes enigmas históricos, estableciéndose varias versiones, desde la glorificación de Tito Livio a la visión tiránica de William Shakespeare. Capcom ha optado por revindicar al personaje, y convertir a Cicerón en una especie de personaje ladino anti-cesariano, y defensor de las virtudes republicanas. Aunque el juego tiene varios fallos históricos como la presencia del Coliseo (Se construyó unos años más tarde) o la implicación de Cicerón en la trama cesariana (su papel en la realidad, por lo que nos han transmitido las fuentes históricas, es puramente testimonial), hay que decir que lo básico del desarrollo de la historia está bien pensado, estableciendo la lucha entre el senado y los cónsules tan típica del final de la república Romana.
Dos juegos en uno
Esta idea argumental divide el juego en dos personajes: Agrippa, hijo del condenado y que pasa de ser un victorioso general a gladiador, y Octaviano, sobrino de César y que intenta conocer todos los secretos del corrupto senado romano. Las fases del primero son juegos de acción en la tradición de Capcom, mezclando a partes iguales títulos como Knights of the Round con el más reciente Devil May Cry. En cuanto al segundo, sus fases mezclan la infiltración con ciertos toques de aventura gráfica.
Las fases de Agrippa se desarrollan principalmente en los coliseos y exteriores, estando enfocadas en la lucha sin cuartel contra todos los enemigos. A diferencia de Onimusha 3, esta vez nos encontramos con un juego de acción sin medias tintas, con golpes especiales y sobre todo un medidor de «Salvas», las cuales actúan como combos. Esto es realmente importante, ya que las armas en el juego se rompen fácilmente, y cuanto más salvas obtengamos en los Coliseos, más posibilidades tendremos de que nos lancen desde el público nuevas cimitarras o hachas.
El sistema de combate, la física, y la variedad de armas, recuerdan poderosísimamente al título de la desaparecida Rebel Act, Blade: Edge of Darkness. De hecho, el personaje puede llegar a coger un brazo y atacar con él, aparte de la posibilidad de usar un escudo. Este modo es como juego de acción simplemente brillante, y es la mejor representación que se ha hecho del mundo de los Gladiadores en consola. Ahora, las arenas y entornos se repiten bastante, resultando monótono a la larga.
La fases de Octaviano son realmente un remedo de los juegos de infiltración actuales, y obligan al personaje a realizar la mayoría de sus acciones sigilosamente y de manera estudiada. El principal problema de la infiltración es que la inteligencia artificial de los personajes es de muy bajo nivel, y no puede competir con las apuestas actuales de Konami o Ubi Soft en el género.
No es de recibo que los personajes se caigan cinco veces con la misma cáscara de plátano, estos deberían recordar su error anterior. Para compensar esto, tenemos dos elementos interesantes que son los toques de aventura gráfica y el marco de Roma.
Aunque está muy lejos de ser una aventura pura, Octaviano puede hablar con muchos personajes a lo largo del juego y obtener información sobre lo que se cuece en la ciudad eterna. Estas conversaciones, la mayoría de las veces, no pasan de dos respuestas a lo sumo, estando muy alejadas de los juegos dialectales de LucasArts. Pero de vez en cuando deberemos realizar combinaciones de respuestas para convencer a los personajes del juego, algo muy pocas veces visto en el género en consola. Por último, las fases de Octaviano se desarrollan en distintas partes de la ciudad de Roma, a las cuales podemos acceder mediante un mapa cenital con las distintas zonas. Otro elemento que recuerda bastante a las antiguas aventuras.
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